General Kurt Zeizler

**Compañia** Mar 24 Abr - 3:39:17

Kurt Zeitzler, nació en Gossmar bei Luckau, Brandenburgo, Alemania, el 9 de junio de 1895. Fue hijo de un pastor protestante.

Se recibió de oficial del ejército y combatió durante la Primera Guerra Mundial como comandante de un batallón de infantería. Al finalizar la guerra permaneció en el ejército.

Durante los años 30 fue un ardiente simpatizante de los nacionalsocialistas al cual se adhirió. En 1934 fue transferido a las fuerzas Panzer y en 1938 alcanzó el rango de Teniente Coronel y al año siguiente, el 01 de junio fue ascendido a Coronel y puesto al mando del 60º Regimiento.

Durante la invasión de Polonia en 1939 sirvió en el 14º Ejército del XXII Grupo de Ejércitos bajo el mando del General List. En 1940 fue nombrado Jefe de Estado Mayor del General Paul von Kleist prestando servicio en Francia. Permaneció con Kleist durante las campañas de Grecia, Yugoslavia y en el Frente del Este. El 18 de mayo de 1941 fue condecorado con la Cruz de Caballero para su Cruz de Hierro y el 5 de octubre de ese año fue nombrado Jefe de Estado Mayor del 1º Grupo Panzer en Yugoslavia y el Frente del Este.

El 01 de febrero de 1942 fue ascendido a Mayor General y nombrado Jefe de Estado Mayor del Grupo de Ejércitos D, bajo el mando del General Gerd von Rundstedt. Participó destacadamente durante el intento de invasión en Dieppe del 19 de agosto, por las fuerzas canadienses, a quienes inflingió una derrota sin atenuantes. Fue ascendido a Coronel General. Los informes sobre el excelente desempeño de Zeitzler llegaron a oídos de Hitler, quien lo llamó para trabajar en su Cuartel General.

Zeitzler fue ascendido a Generaloberst y puesto en la lista de ascensos para ser promovido a General de Infantería. En setiembre, tanto Keitel como Jodl se opusieron al nombramiento de Zeitzler para reemplazar al General Halder. Zeitzler era un buen comandante, pero no tan destacado como Halder y en la lista de postulantes había otros oficiales antes que él. Sin embargo la confianza que Zeitzler le inspiraba a Hitler, era mayor que los intentos de Keitel y Jodl para que cambiara de idea. Recibió el nombramiento de Jefe del Estado Mayor General el 24 de setiembre de 1942.

Zeitzler se llevaba muy bien con Hitler, quien esperaba un apoyo irrestricto a su liderazgo en la conducción de la guerra. Pero eso no fue así, pronto Zeitzler se opuso a la decisión del Führer de no retroceder las líneas bajo ninguna circunstancia. Insistió repetidamente que le permitiera a Paulus evitar ser embolsado en Stalingrado, pero cuando ocurrió el desastre, Zeitzler le manifestó a Hitler, hasta en cuatro oportunidades, su deseo de renunciar. Sin embargo el Führer se negó rotundamente tratando de minimizar las consecuencias que tendría la derrota del 6º Ejército en el curso de la guerra.

Zeitzler fue siempre muy meticuloso en su trabajo en especial con Hitler a quien presentaba informes detallados muy profesionales junto a un resumen que hasta un lego en la materia podía entender acompañándolos con gran cantidad de mapas y gráficos. Durante la campaña de Stalingrado, Zeitzler le presentó su informe junto a un resumen de cinco puntos, que en sus memorias reprodujo, diciendo entre otras cosas, que debido a la ofensiva de verano, el territorio que debía ser ocupado en el Este no correspondía ya a la magnitud del ejército de ocupación. Había muy pocos soldados y demasiado territorio y eso podría producir una catástrofe. Además advirtió que el sector más peligroso del frente oriental, era el largo y débil flanco que iba desde Stalingrado al ala derecha del Grupo de Ejércitos Centro, sostenido por las tropas más débiles y menos confiables eran la de los aliados. Destacó el insuficiente aprovisionamiento de hombres, equipos, armamento y municiones que podría tener desastrosas consecuencias. Destacó el hecho de que los rusos estaban mejor preparados y mandados en 1942 y era esencial una mayor precaución por parte de la OKW. Además hizo una larga descripción de las deficiencias del transporte en ferrocarriles y otros asuntos de carácter técnico.

Hitler lo llamó pesimista, pero el tiempo le daría a Zeitzler la razón. Zeitzler se enfrentó a los argumentos de Keitel y Jodl en presencia del Führer, cuando afirmaba que era necesario el repliegue de las fuerzas de Paulus. Zeitzler insistía que era un crimen sacrificar al 6to Ejército, pero los dos altos oficiales sabían cómo darle gusto a Hitler.

A esos enfrentamientos se sumó su permanente llamada de atención a la deficiente operación de la Luftwaffe, lo que le causó, en presencia de Hitler, discusiones con Göring, quien no podía refutar sus argumentos. Con pruebas irrefutables demostraba Zeitzler que el jefe de la Luftwaffe desconocía los detalles de las operaciones de sus propias fuerzas.

Las relaciones con Hitler, Keitel y Jodl eran insostenibles y Zeitzler llegó a la conclusión de que en la práctica no era el jefe del Estado mayor General, pues Hitler no aceptaba sus decisiones. Expuso razones de salud para presentar su renuncia y fue reemplazado por el General Heinz Guderian el 10 de julio de 1944, pasando a la Reserva del Führer. Kurt Zeitzler no participó en el atentado del 20 de julio, pese a que su ayudante Günther Smend trató insistentemente para que se plegara a la conspiración. El 31 de enero de 1945, fue pasado al retiro.

Durante la posguerra, Zeitzler permaneció en un campo de prisioneros en Inglaterra hasta que fue liberado en 1947. Escribió varios artículos y documentos sobre las campañas en que participó, en especial sobre la Campaña de Stalingrado.

Kurt Zeitzler falleció en Hohenaschau, Chiemgau, Alta Bavaria, el 25 de setiembre de 1963.